Recientemente compré una nueva KTM 1090 de un concesionario aquí en Oregón. La conduje directamente del lote y la llevé de viaje, menos de 600 millas y tuve muchos problemas con la moto, problemas de arranque, ruidos y vibraciones. La llevé de vuelta al concesionario y me dieron otra moto. Les pregunté qué pasó con la otra moto y no me lo quisieron decir y KTM tampoco me lo quiso decir, parece que hay problemas con la 1090 y están tratando de que el público no lo sepa. ¡No compres una 1090, son una porquería!